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Sophie Turner (Sansa Stark en GOT): "Solía pensar mucho en el suicidio"
Es fácil estar de este lado, ver su éxito por televisión y pensar que tienen todo, que está todo bien. Sí, sus contratos son millonarios, sus carreras están casi aseguradas y no deberán preocuparse por un montón de cosas que otras personas sí, pero para los actores reconocidos lidiar con tanto éxito a veces es especialmente complicado. Y en muchos casos, eso termina mal. Sophie Turner transitó por un camino similar hasta no hace mucho tiempo. La actriz saltó a la fama a los 15 años en Game of Thrones por su papel de Sansa Stark –una de las hijas de una de las tantas familias protagonistas de la ficción de HBO–. Hoy, su personaje es uno de los ejes sobre los cuales se mueve la serie, y esa importancia cada vez más grande ha traído alguna que otra consecuencia en su salud.
Según contó al podcast Phill in the blanks, Turner se encuentra transitando las últimas etapas de una depresión que se prolongó durante los últimos cinco años de su vida. "He sufrido depresión durante los últimos cinco o seis años y hoy mi mayor reto es lograr levantarme de la cama, conseguir salir de casa y aprender a quererme a mí misma", relató la actriz de GOT, que acaba de estrenar su octava y última temporada.
Turner aseguró que haber ingresado tan joven a un fenómeno tan masivo y exitoso afectó sus relaciones con amigos y familiares durante su adolescencia, a la vez que se volvió casi imposible para ella aguantar los comentarios negativos sobre su apariencia en las redes sociales. "Solo lloraba y lloraba y pensaba: 'No puedo salir. No quiero hacer nada. (...) Todo empezó a irse a pique cuando alcancé la pubertad, como a los 17 años. Mi metabolismo se ralentizó muchísimo y empecé a ganar peso. Y luego tuve que enfrentarme al escrutinio de las redes sociales y todo eso, y en ese momento fue cuando empezó a golpearme. Las redes contribuyeron. No diría que fue la razón principal, pero sí un catalizador".
Para Turner, que tiene más de diez millones de seguidores en sus cuentas de Instagram y Twitter, los comentarios eran cada vez más insoportables y comenzaron a afectar la manera en la que ella misma se veía. "Me decía a mí misma: 'Sí, estoy llena de granos. Sí, estoy gorda. Soy mala actriz'. Y me lo creía. Veía 10 comentarios fantásticos y los ignoraba, pero uno negativo me hundía".
También comentó que en algún momento de esa etapa oscura, pensó en hacerse daño. "Solía pensar mucho en el suicidio cuando era más joven. La verdad es que no sé por qué. Quizá solo sea una fascinación extraña que solía tener, pero sí, lo pensaba. No creo que nunca lo hubiera intentado. No lo sé", dijo. A su vez, agregó que su amiga y compañera de elenco Maisie Williams –Arya Stark en la ficción– pasó por algo similar y durante un tiempo lo transitaron juntas. "Maisie y yo pasamos por lo mismo, comprábamos comida y nos quedábamos en la cama. No socializamos con nadie en dos años”.
Sin embargo, con el tiempo logró salir del pozo de la depresión. Comenzó a ir a terapia, se está medicando y conoció a Joe Jonas, con quien ahora está comprometida, y todo conspiró para ayudarla. "Ahora me quiero a mí misma, o más de lo que solía. Estoy con alguien que me ayuda a darme cuenta de tengo ciertas cualidades positivas, supongo. Cuando alguien te dice cada día que te quiere, te hace pensar los motivos por los que te quiere, y también quererte un poco más a ti misma. Así que sí, me quiero", aseguró emocionada.
